Les compartimos esta valiosa contribución realizada por un equipo multidisciplinario de 12 investigadores, en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia).
Los investigadores fueron: Jenny Ampuero, Jhonny Atila, Darío Enríquez, María Pía Franco, Carol Gainsborg (UPSA), Ana María Gottret, Rosmery Machicado, Mercedes Nostas, Martha Paz (UEB), Eliana Roca, Dunia Sandoval (UEB), Freddy Tinajeros (U. Postgrado Salud), María Jesús Villanueva.
La investigación descriptiva de tipo transversal se planteó el objetivo de conocer las violencias en las interacciones sociales de los universitarios de pregrado de Santa Cruz. Fue desarrollado por un grupo multidisciplinario de docentes de la universidad estatal y de universidades privadas de la región.
Las dimensiones abordadas en la investigación se explican en cuatro secciones:
a) La primera muestra los datos sociodemográficos de los encuestados.
b) La segunda está referida a las situaciones de violencia en espacios universitarios: acoso sexual explicado mediante cuatro categorías; violencia y rendimiento académico; acciones institucionales frente al acoso sexual; prácticas sociales, discursos y relaciones de género; violencia en las redes digitales; y violencia verbal.
c) La tercera sección describe la violencia en las relaciones laborales.
d) La cuarta sección aborda el síndrome de Burnout (SB) o estado de agotamiento laboral entre residentes médicos.
Gracias a los investigadores, aquí les compartimos la ficha técnica y los resultados de la investigación:
Ficha técnica del estudio
Instituciones participantes | Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), Universidad Evangélica Boliviana (UEB), Universidad Privada Domingo Savio (UPDS), Universidad Tecnológica Privada de Santa Cruz (UTEPSA), Universidad Nur y otras. |
Título de la investigación | Violencias en las interacciones sociales de los universitarios de Santa Cruz |
Objetivos de la investigación | Caracterizar los tipos de violencia que los estudiantes universitarios de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra enfrentan en su condición y proceso de formación profesional |
Equipo de investigación | Jenny Ampuero, Jhonny Atila, Darío Enríquez, María Pía Franco, Carol Gainsborg (UPSA), Ana María Gottret, Rosmery Machicado, Mercedes Nostas, Martha Paz (UEB), Eliana Roca, Dunia Sandoval (UEB), Freddy Tinajeros (U. Postgrado Salud), María Jesús Villanueva |
Tipo de investigación | Investigación descriptiva de tipo transversal. |
Universo | Base de datos de 3.557 formularios válidos. |
Unidad de análisis | Estudiantes universitarios mayores de 17 años. |
Cobertura geográfica | Departamento de Santa Cruz |
Alcance | Estudiantes universitarios de pregrado de Santa Cruz. |
Recolección | Encuesta personal mediante cuestionario estructurado vía internet (Google Forms) sobre la base de ocho dimensiones definidas por el equipo de investigación. |
Tamaño de la muestra | 3557 estudiantes: 2403 de la universidad estatal cruceña (UAGRM) y 1154 de universidades privadas |
Error muestral | 1,643% |
Nivel de confianza | 95% |
Varianza | 0.50 para p; 0.50 para q |
Período de recogida de información | Desde el viernes 7 de julio hasta el lunes 17 de julio de 2023 |
Procedimiento | Aleatorio. Se utilizaron formularios interactivos en internet para respuesta en línea, con controles para evitar viralización no deseada. La solicitud se dirigió a grupos específicos en redes sociales cerradas. |
I. CARACTERÍSTICAS SOCIODEMOGRÁFICAS
La muestra estuvo conformada por 3.557 personas, de las cuales 68% son estudiantes de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno y 32% de universidades privadas de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra (UEB, UPDS, UTEPSA, NUR, UPSA).
Con respecto al tipo de colegio del cual proceden los universitarios encuestados, un 50% procede de colegios fiscales, 28% de públicos y 22% de colegios de convenio.
Las facultades en las que estudian quienes respondieron la encuesta son: Humanidades (18%), Ciencias Económicas y Empresariales (15%), Ciencias Jurídicas, Políticas y Relaciones Internacionales (13%), Bioquímica y Farmacia (10%), Ciencias Agrícolas (9%), Salud Humana (9%), Politécnica (6%), Ciencias de la Computación y Telecomunicaciones (4%) y otras (16%). Destaca que en esta oportunidad se ha alcanzado un porcentaje importante en facultades de provincias (13%).
En un 73% se trata de estudiantes de Carreras semestralizadas y 27% anualizadas que están cursando entre el primer y el cuarto semestre, o lo que es lo mismo, primer y segundo años (49%), entre el quinto y octavo semestres, o tercer y cuarto años (42%), y entre el noveno y décimo semestres, o quinto año (9%).
1.1 Sexo, edad, estado civil y género
Del total de 3.557 encuestados, 61% se identifican como mujeres y 39% como varones.
En referencia a su edad, entre 18 y 22 años suman 61%, entre 23 y 25 años representan 21%, entre 26 y 35 años alcanzan 13% y de 36 años a más son el 4%. Sólo el 1% es menor de edad.
Un 15% manifiesta ser padre soltero o madre soltera. De ese porcentaje, algo más de la tercera parte son varones, mientras las mujeres casi alcanzan las dos terceras partes, tanto en la Universidad estatal como en las privadas.
En referencia a la identidad de género, algo más de 60% se declara mujer, 39% se reconoce como hombre y menos de 1% se identifica como transexual, transgénero, travesti u otro género. Preguntados sobre su orientación sexual, 91% se declara heterosexual, 7% bisexual, 1% homosexual y 1% eligió otro, ninguno o no respondió a la pregunta.
En respuesta al estado civil, 89% se declara soltero, 5% dice estar casado, 5% vive con su pareja en unión libre y 1% reporta separación, divorcio, viudez o ninguna de las anteriores opciones.
1.2 Identidad sociocultural
Como en estudios anteriores, la mayoría de los jóvenes universitarios declara no pertenecer a ninguna identidad sociocultural mencionada en la encuesta: 63% marcó ninguna y 19% eligió mestizo. Por su parte, quienes sí eligieron una identidad sociocultural suman 18%: se identifican como quechuas y aimaras un 10%, indígenas del oriente un 6% y otros un 2%.
Además del castellano, que todos dominan por ser estudiantes de educación superior en instituciones que imparten instrucción en ese idioma, una parte de las personas encuestadas habla otros idiomas: inglés 20%, quechua 7%, guaraní 2%, portugués 2% y aymara 1%. Cifras aún menores se verifican para otros idiomas extranjeros y también para varias lenguas del oriente boliviano (guarayú, bésɨro, ayoreo, etc). Como se constató en estudios anteriores, nuevamente se evidencia escaso uso o reconocimiento de las lenguas indígenas de Bolivia y en particular de las lenguas del oriente boliviano, por parte de las nuevas generaciones de jóvenes.
1.3 Lugar de procedencia
Los universitarios que respondieron a la encuesta y se forman en las casas de estudios superiores de Santa Cruz en un 83% nacieron en el departamento de Santa Cruz, mientras 4% nacieron en Cochabamba, 3% en Chuquisaca, 3% en La Paz, 2% en Beni, 3% en otros departamentos (Tarija, Potosí, Oruro, Pando) y 2% provienen de otros países.
1.4 Tecnología en los cursos
En cuanto a las herramientas tecnológicas para cursar sus materias, el celular es el más utilizado entre los estudiantes: su uso exclusivamente personal alcanza un 96%, mientras 3% lo tiene que compartir y apenas 1% no cuenta con él. Le sigue algo lejos, la computadora: su uso personal asciende a 58%, mientras que algo más del 21% la tiene que compartir y algo menos del 21% no cuenta con ella. Finalmente, la tablet tiene muy poca penetración en el mundo universitario: 81% no cuenta con ella, mientras apenas 15% puede darle un uso exclusivamente personal y 4% la comparte.
1.5 Situación laboral
La situación laboral de los encuestados, tanto mujeres como varones, es la siguiente: 48% trabaja sin remuneración como practicante, pasante, voluntario o en empresa familiar; 25% se declara sin empleo; 18% trabaja por cuenta propia o es socio de un emprendimiento; y 9% es obrero o empleado con remuneración.
De quienes trabajan por cuenta propia o son socios de un emprendimiento, un poco más de la tercera parte son pequeños o medianos empresarios, otra tercera parte son profesionales independientes y el resto se dedica al comercio minorista o mayorista.
En referencia al tamaño de la empresa en la que trabajan, la mitad son microempresas (con 9 trabajadores o menos) y, en la otra mitad, en orden descendente se encuentran las empresas grandes (más de 50 trabajadores), las pequeñas empresas (de 10 a 19 trabajadores) y las medianas (de 20 a 49 trabajadores).
II. SITUACIONES DE VIOLENCIA EN ESPACIOS UNIVERSITARIOS
- ESCALA DE MEDICIÓN DE SITUACIONES INDICATIVAS DE ACOSO SEXUAL
Se consultó sobre si las personas encuestadas habrían vivido situaciones indicativas de acoso sexual en espacios universitarios. Para ello se identificaron 21 preguntas: desde llamadas a comentarios, invitaciones, insinuaciones, bromas, miradas, acecho y gestos de índole sexual, hasta exhibicionismo, pornografía, contacto físico sin consentimiento y chantaje sexual, entre otros.
En el total de las 21 preguntas, 58% de los encuestados indica que nunca sufrieron estos comportamientos, mientras 42% indica que sí ha vivido al menos una de esas situaciones de violencia: 39% refiere que los eventos sucedieron hace más de un año, mientras 3% manifiesta que se dieron en los últimos doce meses, con distinta reiteración (1 a 3 veces, 4 a 10 y más de 10 veces en el último año).
Hay diferencias cuando se divide la información para comparar las situaciones de acoso sexual de la universidad estatal (UAGRM) con las universidades privadas en Santa Cruz de la Sierra. En la UAGRM, 53% dice no haber vivido nunca esas experiencias, mientras 47% sí reconoce haberlas sufrido: 44% hace más de doce meses y 3% en el último año. En las universidades privadas, 68% manifiesta no haber vivido nunca tales eventos, mientras 32% señala que sí los ha sufrido: 30% hace más de un año y 2% en los últimos doce meses.
Estos totales generales correspondientes a las 21 preguntas de acoso sexual en espacios universitarios se agrupan en 5 categorías o elementos para una mayor aproximación.
2.1.1 Tipos de situaciones indicativas de acoso sexual
- Comportamiento verbal de contenido sexual no consentido
Se les hizo estas preguntas a los estudiantes universitarios: ¿Ha recibido llamadas, correos, notas, sms, chats o mensajes por cualquier otro medio con contenidos sexuales no deseados de alguien de la comunidad universitaria? ¿En las relaciones laborales o de estudio ha recibido comentarios intimidatorios sobre su modo de vestir, sobre su cuerpo o su sexualidad que le han incomodado? ¿Alguien de la comunidad universitaria le ha hecho invitaciones a citas íntimas aun después de que usted se ha negado insistentemente?
¿Alguien de la comunidad universitaria le ha hecho de forma reiterada insinuaciones de índole sexual no deseadas por usted? ¿Alguien de la comunidad universitaria le ha asediado con frecuentes bromas, preguntas y comentarios de contenido sexual ofensivo que le causan malestar?
67% nunca sufrió las situaciones consideradas en este elemento o categoría, 63% en la UAGRM versus 75% en universidades privadas. Del 33% que sí fue víctima de estos comportamientos de acoso sexual, 28% los sufrió hace más de un año y 5% indica que los vivió en los últimos doce meses. En la UAGRM, del 37% que enfrentó esos comportamientos, 31% señala que fueron hace más de doce meses y 6% que acontecieron en el último año. Por su parte, del 25% que sufrió esos comportamientos en las universidades privadas, 21% indica que ocurrieron hace más de un año y 4% que sucedieron en los últimos doce meses.
2.1.1.2 Comportamiento no verbal de contenido sexual no deseado
Las preguntas aquí planteadas fueron las siguientes: ¿Se ha sentido incómodo/a porque alguien de la comunidad universitaria le miraba insistentemente de manera morbosa?
¿Alguna vez en el espacio universitario le hicieron señales o gestos de índole sexual que le incomodaron y ofendieron? ¿Ha sido molestado por un/a exhibicionista o alguna vez alguien mostró sus órganos sexuales o se desvistió delante de usted sin su consentimiento en baños, vestidores, patios o cualquier lugar de la universidad? ¿Ha sido molestado/a por alguien de la comunidad universitaria que le ha espiado en baños, camerinos de gimnasios
o lugares similares sin su consentimiento? ¿Alguien de la comunidad universitaria, para satisfacer su placer sexual, le ha obligado a ver dibujos, fotografías, imágenes o cualquier otra representación gráfica de contenido sexualmente explícito o pornográfico produciéndole incomodidad y malestar?
76% nunca sufrió los comportamientos incluidos en esta categoría: 72% en la UAGRM versus 84% en universidades privadas. Del 24% que sí experimentó esos casos de acoso, 21% los sufrió hace más de un año y 3% indica que los vivió en los últimos doce meses. En la UAGRM, del 28% que enfrentó ese comportamiento de acoso sexual, 25% señala que fue hace más de doce meses y 3% que aconteció en el último año. Por su parte, del 16% que sufrió tales comportamientos en las universidades privadas, 14% indica que ocurrieron hace más de un año y 2% que sucedieron en los últimos doce meses.
2.1.1.3 Contacto físico de carácter sexual no deseado
Se planteó las siguientes preguntas a los estudiantes universitarios: ¿Alguien de la comunidad universitaria ha intentado besarle o abrazarle en contra de su voluntad?
¿Alguien de la comunidad universitaria le ha tocado sus senos, sus nalgas, sus órganos sexuales, le ha “metido mano”, le ha hecho pellizcos, palmaditas, le ha atrapado para abrazarle, le ha rozado con el órgano sexual sin su consentimiento? ¿Alguien de la comunidad universitaria le ha obligado a tocarle sexualmente en contra de su voluntad?
86% nunca sufrió las situaciones contenidas en esta categoría, 84% en la UAGRM versus 91% en universidades privadas. Del 14% que sí vivió esos eventos, 12% los sufrió hace más de un año y 2% indica que los vivió en los últimos doce meses. En la UAGRM, del 16% que enfrentó esos comportamientos, 13% señala que fueron hace más de doce meses y 3% que acontecieron en el último año. Por su parte, del 9% que los sufrió en las universidades privadas, 7% indica que ocurrieron hace más de un año y 2% que sucedieron en los últimos doce meses.
2.1.1.4 Acercamiento sexual no bienvenido, repetido y no recíproco
Estas fueron las preguntas aquí planteadas: ¿Ha sentido que alguien de la comunidad universitaria le ha seguido insistentemente, se le ha acercado excesivamente sin su consentimiento, produciéndole incomodidad e inseguridad? ¿Alguna vez le han obligado a vestirse de modo provocativo, usando escotes, minifaldas o ropa ajustada en la universidad para actividades educativas o laborales? ¿Le ha ocurrido que alguien de la comunidad universitaria ha aprovechado situaciones supuestamente educativas/laborales (visitas al despacho, seminarios, tutorías, capacitaciones, llamados a oficina, salidas de campo, eventos) para forzar intimidad contra su voluntad? ¿Alguien de la comunidad universitaria le ha solicitado explícitamente tener relaciones sexuales contra su voluntad a pesar de que usted no lo ha aprobado?
87% nunca sufrió las situaciones consideradas en esta categoría, 84% en la UAGRM versus 92% en universidades privadas. Del 13% que sí vivió esos eventos, 11% los sufrió hace más de un año y 2% indica que los vivió en los últimos doce meses. En la UAGRM, del 16% que enfrentó esos comportamientos, 14% señala que fueron hace más de doce meses y 2% que acontecieron en el último año. Por su parte, del 8% que los sufrió en las universidades privadas, 7% indica que ocurrieron hace más de un año y 1% que sucedieron en los últimos doce meses.
2.1.1.5 Actos de abuso de poder ejercido con el propósito de recibir favores sexuales
Se les hizo estas preguntas a los estudiantes universitarios: ¿Alguien de la comunidad universitaria le ha presionado para que usted se desnude, le muestre partes de su cuerpo, le envíe fotografías o se vista de cierta manera, en contra de su voluntad y por satisfacción de la persona que lo demanda? ¿ Ha sido amenazado/a por alguien de la comunidad universitaria con sanciones u otras formas de perjuicio en caso de no acceder a propuestas sexuales o afectivas? ¿Ha recibido ofertas de beneficios o recompensas en su carrera/trabajo por alguien de la comunidad universitaria a cambio de favores sexuales o aceptar invitaciones o propuestas sexuales? ¿Ha sido víctima de chantaje, intimidación o amenaza por alguien de la comunidad universitaria, para evitar que denuncie el acoso sexual?
El 92% de los encuestados nunca sufrió las situaciones incluidas en esta categoría: 91% en la UAGRM versus 95% en universidades privadas. Del 8% que sí experimentó esos eventos, 6% los sufrió hace más de un año y 2% indica que los vivió en los últimos doce meses. En la UAGRM, del 9% que enfrentó esos comportamientos, 7% señala que fueron hace más de doce meses y 2% que acontecieron en el último año. Por su parte, del 5% que los sufrió en las universidades privadas, 3% indica que ocurrieron hace más de un año y 2% que sucedieron en los últimos doce meses.
2.1.2 Personas acosadoras
Cuando se trata de identificar a las personas acosadoras de los diversos tipos de acoso sexual que fueron señalados en el punto anterior, el 25,5% de los encuestados apunta al estudiante compañero/a y el 1,1% apunta al docente, 0,2% a alguna autoridad universitaria y 0,1% a algún administrativo. En el caso de la UAGRM, los porcentajes suben a 28,8%, 1,5%, 0,2% y 0,1% respectivamente; y en el caso de las universidades privadas, bajan a 18,8%, 0,3%, 0,2% y 0,1%.
Cruzada esta respuesta con la del sexo de los encuestados, los resultados generales son: del 100% de varones encuestados, 18,3% responden que fueron objeto de acoso sexual por parte de estudiantes compañeros o compañeras de estudios; 0,9% por docentes varones o mujeres; 0,1% por autoridades; y 0,1% por trabajadores administrativos o de servicios. Por su parte, del total de mujeres encuestadas, 30,2% indican que fueron acosadas por
compañeros o compañeras de estudio; 1,2% por docentes varones o mujeres; 0,2% por autoridades; y 0,1% por trabajadores administrativos o personal de servicio.
Del total de universitarios encuestados, el 72,8% eligió la respuesta de “ninguno” entre la lista de opciones de personas acosadoras identificadas en los párrafos anteriores. De ellos, 43% son varones y 57% son mujeres.
A continuación, el desglose de las personas acosadoras miembros de la comunidad universitaria para cada una de las cinco categorías establecidas como indicadoras de acoso sexual.
2.1.2.1 Personas acosadoras con comportamiento verbal de contenido sexual no consentido
Respecto al comportamiento verbal de contenido sexual no consentido (llamadas o mensajes, comentarios, invitaciones, insinuaciones y bromas, entre otros), son señaladas como personas acosadoras (sin distinción de sexo) los estudiantes compañeros o compañeras en un 17,5% (19,9% en la UAGRM y 12,7% en las universidades privadas), los docentes varones o mujeres en un 2,5% (3,2% en la UAGRM y 1,0% en las privadas), las autoridades universitarias en un 0,3% (0,4% en la UAGRM y 0,3% en las privadas) y trabajadores administrativos más personal de servicios en un 0,04%.
2.1.2.2 Personas acosadoras con comportamiento no verbal de contenido sexual no deseado
En esta categoría de comportamiento no verbal de contenido sexual no deseado (miradas, gestos, exhibicionismo, pornografía y acecho, entre otros), son señalados como personas acosadoras los estudiantes compañeros o compañeras en un 13,8% (15,8% en la UAGRM y 9,6% en universidades privadas), los docentes varones o mujeres en un 1,1% (1,3% en la UAGRM y 0,6% en privadas), las autoridades universitarias en un 0,2% (0,25% en la UAGRM y 0,09% en privadas) y trabajadores administrativos más personal de servicios en un 0,2% (0,25% en UAGRM y 0,09% en privadas).
2.1.2.3 Personas acosadoras con contacto físico de carácter sexual no deseado
Sobre las agresiones con contacto físico de carácter sexual no deseado (besos, abrazos y tocamientos impúdicos, entre otros), son apuntados como causantes los estudiantes compañeros o compañeras en un 8,1% (9,3% en la UAGRM y 5,5% en universidades privadas), los docentes varones o mujeres en un 1,3% (1,7% en la UAGRM y 0,3% en privadas), las autoridades universitarias en un 0,1% (0,12% en UAGRM y 0,17% en privadas) y trabajadores administrativos más personal de servicios en un 0,2% (0,29% en UAGRM y 0,09% en universidades privadas).
2.1.2.4 Personas acosadoras con acercamiento sexual no bienvenido, repetido y no recíproco
Respecto a los acercamientos sexuales no bienvenidos, repetidos y no recíprocos (forzamiento de intimidad y/o de vestir ropa de modo provocativo, entre otros), son señalados como personas acosadoras los estudiantes compañeros o compañeras en un 8,2% (9,5% en la UAGRM y 5,5% universidades privadas), los docentes varones o mujeres en un 1% (1,2% en la UAGRM y 0,3% en privadas), las autoridades universitarias en un 0,2% (0,3% en UAGRM y 0% en privadas) y trabajadores administrativos más personal de servicios en un 0,1% (0,04% en UAGRM y 0,17% en universidades privadas).
2.1.2.5 Personas acosadoras con actos de abuso de poder ejercido con el propósito de recibir favores sexuales
Para este tipo de agresiones sexuales (chantajes, intimidaciones y amenazas, entre otros), son apuntados como causantes los estudiantes compañeros y compañeras en un 4,7% (5,5% en la UAGRM y 3% en universidades privadas), los docentes varones y mujeres en un 0,7% (1% en la UAGRM y 0,3% en privadas), las autoridades universitarias en un 0,2% (0,21% en UAGRM y 0,09% en privadas) y trabajadores administrativos más personal de servicios en un 0,1% (0,12% en UAGRM y 0,17% en universidades privadas).
2.1.3 Afectación de actividades académicas por experiencias de acoso sexual
En referencia al grado de afectación en las actividades académicas de quienes fueron objeto de eventos de acoso sexual, 23% manifiesta que su asistencia a clases disminuyó, 17% que se mantuvo igual y 2% que aumentó; 23% dice que su participación en clase disminuyó, 16% que se mantuvo igual y 3% que aumentó; 18% dice que vio disminuir su cumplimiento de tareas, 19% que lo mantuvo igual y 3% que aumentó; 23% manifiesta que disminuyó su asistencia a reuniones de estudio con sus pares, 17% que se mantuvo igual y 2% que aumentó; 20% dice que se redujo mucho su rendimiento en exámenes, 17% que se mantiene igual y 4% que aumentó; finalmente, 22% dice que sus calificaciones disminuyeron, 16% que se mantuvieron igual y 4% que aumentaron.
2.1.4 Soporte institucional para abordar casos de acoso sexual en la Universidad
El 80% de los estudiantes encuestados, tanto mujeres como varones, dice desconocer que exista en la universidad un departamento que les ayude en caso sufran algún evento de acoso sexual, mientras que el 20% sí conoce la existencia de este servicio de ayuda para los casos mencionados. En la UAGRM, 90% de los estudiantes dice desconocer este soporte institucional y solo 10% lo conoce, en tanto que en las universidades privadas 60% dice desconocer este soporte y 40% manifiesta conocerlo.
Del total de estudiantes que dicen conocer una instancia universitaria que brinda la ayuda mencionada (20% en promedio y sin distinguir las universidades privadas de la pública), en una pregunta de selección múltiple abierta, con hasta nueve opciones de respuestas, las más destacadas refieren al departamento de bienestar estudiantil (70%), a la dirección de carrera (41%), al tribunal de justicia universitaria (23%), al decanato (21%), a los delegados estudiantiles (19%) y al vicedecanato (18%).
En cuanto a si el conjunto de personas encuestadas conoce normas internas que protejan a los miembros de la comunidad universitaria en estos eventos de acoso sexual, 67% indica desconocer estas normas de protección (76% en la UAGRM y 48% en las universidades privadas) y 33% manifiesta sí saber de ellas (24% en la UAGRM Y 52% en las universidades privadas).
Ante la pregunta sobre cuáles son las normas externas e internas que protegen a las personas de la comunidad universitaria de las situaciones referidas en el cuestionario, los encuestados eligen: Reglamento en un 68%, Protocolo en un 13,8%, ambos en 17,8% y otro en 0,4%.
Consultados los encuestados sobre si conocen procedimientos o rutas de apoyo para que las personas de la comunidad universitaria que pasen por estos eventos sepan qué hacer y a dónde acudir por ayuda, 75,8% de los encuestados contestan que no y 24,2% que sí.
Del grupo que dice conocer los procedimientos o rutas de apoyo mencionados (24,2%), en opciones múltiples, 80% invoca la Ley 348 (Ley integral para garantizar a las mujeres una vida libre de violencia), 56% indica el Código Penal, 37% señala la Constitución Política del Estado y 1,2% señala otro y 0,8% no sabe o no responde.
2.1.5 Denuncias contra los causantes de acoso sexual
88,7% de los encuestados dice que siempre se debe denunciar a los causantes de estas situaciones de acoso sexual, mientras 10,7% señala que sólo deberían denunciarse los casos graves y apenas un 0,6% opina que estos casos nunca se deben denunciar.
En referencia a las instancias que deben acoger estas denuncias, en una pregunta de opciones múltiples, 60,4% del total de los encuestados considera que deben intervenir el director de carrera, el vicedecano o el decano; 59,9% menciona al departamento de bienestar estudiantil; 59,6% pide la intervención de la Policía; 49% llama a la intervención del Tribunal de Justicia Universitaria; 37% pide la intervención de la Fiscalía; y 30% la acción de delegados estudiantiles.
2.2 PRÁCTICAS SOCIALES, DISCURSOS Y RELACIONES DE GÉNERO
Del total de encuestados, tanto varones como mujeres, 92% dice haber seguido su carrera por propia decisión (UAGRM 91% y privadas 94%). Reconocen que fue decisión de su padre el 5% (UAGRM 6% y privadas 4%), de su madre el 5% (UAGRM 5% y privadas 4%) y de otro familiar el 4% (UAGRM 4% y privadas 3%).
En referencia a una posible discriminación sexista dentro de la carrera elegida, 84% de los encuestados manifiesta que perciben no haber sufrido discriminación (UAGRM 81% y privadas 88%), mientras 16% percibe que sí la han sentido (UAGRM 19% y privadas 12%) por ser varón o mujer en la carrera en la que estudian
Entre quienes perciben discriminación en su contra, 55% señala a un compañero (38% varón y 17% mujer), 47% indica a un profesor (34% varón y 13% mujer), 31% a alguien en el lugar de sus prácticas (19% varón y 12% mujer), 26% a alguien en el lugar donde trabaja (16% varón y 10% mujer) y 23% menciona a un trabajador administrativo (17% varón y 6% mujer).
Consultados sobre si han pensado alguna vez en cambiar de carrera por el simple hecho de ser varón o mujer, 89% respondió que no (88% de la UAGRM y 92% de las universidades privadas) y 11% contestaron que sí (12% de la UAGRM y 8% de las privadas).
2.3 VIOLENCIA 2.0
2.3.1 Recursos en redes sociales usados con mayor frecuencia
El recurso en redes sociales de mayor uso (muchas veces y muchísimas veces) es el Whatsapp con 80%, seguido por TikTok en 46%, Youtube en 44%, Facebook en 43% e Instagram en 34%.
2.3.2 Mensajes agresivos en redes sociales
Con relación a la percepción de violencia en redes sociales, en una pregunta de selección múltiple abierta, se evidenció que la gran mayoría de las personas encuestadas (73%) manifiesta que no ha experimentado recibir mensajes violentos. Entre las modalidades de violencia que dicen haber sufrido, estas son las señaladas por el total de encuestados: mensajes insultantes (16,1%), fotos degradantes (10,3%), mensajes amenazantes o intimidantes (8,5%), videos degradantes (8,1%), uso de información confidencial o comprometedora (7,6%) y uso de la identidad personal con fines degradantes (5,3%).
2.3.3 Plataformas de mayor riesgo
Cuando se consulta sobre las plataformas de mayor riesgo para que sus usuarios sean objeto de violencia, los encuestados responden que las plataformas donde existe mayor expresión de violencia con mucho y muchísimo riesgo son estas: Facebook con un 74,3% de respuestas; en segundo lugar Whatsapp con un 64,9%; en tercer lugar Instagram con un 51,8%; en cuarto Tik Tok con un 49,8%; y en última instancia YouTube, plataforma en la que la interacción entre usuarios es de por sí menor al resto de las señaladas, con 18,8%, en todos los casos sobre el total de encuestados.
2.3.4 Agresores en redes sociales
Respecto a los perpetradores de violencia en redes sociales, llama la atención que los agresores sean principalmente sus pares: amigo o amiga 11,6%, compañeros de la universidad 13,1% (varones 9,1% y mujeres 4%). Además, se muestra que 6,5% de las agresiones provienen de exparejas. También aparecen docentes de la universidad como agresores con una cifra de 6% (3,4% varones y 2,6% mujeres). Adicionalmente, 3,4% señalan a una persona desconocida; 2,3% a un familiar; 1,3% a un auxiliar de cátedra; y 1% a un miembro del personal administrativo (sin identificar sexo). En cada uno de estos casos, el porcentaje se refiere al total de los encuestados.
2.3.5 Posibles motivos de agresiones
En relación a los motivos por los cuales los estudiantes consideran que podrían ser agredidos en redes sociales, es importante destacar que la mayoría de los encuestados (52%) siente que no poseen características que los harían blanco de agresiones. Sin embargo, los resultados mostrarían una amplia variedad de preocupaciones entre los estudiantes, respecto a la posibilidad de ser objeto de agresión en redes sociales. Estas preocupaciones abarcan aspectos físicos, culturales, de género, sexuales, religiosos, políticos, socioeconómicos y más. Esto resalta la diversidad de las experiencias y temores de los encuestados en las redes sociales, en los porcentajes que se muestran a continuación.
Del total de encuestas con posibilidad de respuestas múltiples a la pregunta, 24% consideran que el motivo de agresión en redes sería su aspecto físico; 8% señalan su creencia religiosa como factor de violencia; 7% señalan el nivel socioeconómico al que pertenecen como motivo; 6% responden que su origen cultural sería la razón; 6% indican su ideología o afiliación política como causal; 5% identifican su orientación sexual como factor; 3% señalan que su identidad de género sería la razón; 2% consideran que su discapacidad sería el motivo; mientras que 22% señalan desconocer una causa específica
para ser objeto de violencia en redes. En todos los casos, los porcentajes se refieren al total de encuestados.
2.3.6 Reacción frente a la agresión sufrida
En relación a las respuestas ofrecidas por los estudiantes respecto de las situaciones de violencia en las redes, destaca que la acción más frecuente o inmediata frente a la violencia en redes es el bloqueo al usuario agresor (79%). Muchos de ellos registran y acumulan pruebas con miras a una posible denuncia (36%), mientras que 34% de las personas encuestadas recurre a modificar sus condiciones de privacidad en las redes como recurso para protegerse de los ataques. 27% evita abrir correos electrónicos de fuentes dudosas para neutralizar posibles ataques. Otro recurso empleado como defensa es denunciar contenidos indebidos ante la administración de las plataformas (25%), en tanto que 18% desactiva la geolocalización de su teléfono móvil para que no controlen su ubicación y 13% tiene un antivirus que les avisa o les bloquea las páginas peligrosas. Finalmente, 9% responde que no toma ninguna de las acciones anteriores como protección frente a agresiones en redes sociales. Cada uno de los porcentajes anteriores está sobre el total de los encuestados.
2.4. VIOLENCIA VERBAL EN LA UNIVERSIDAD
2.4.1. Violencia verbal indirecta
Preguntados sobre la frecuencia de burlas, chistes, bromas o expresiones ridiculizantes (incluidos apodos) de los que han sido objeto en la interacción académica en la universidad, del 100% de los encuestados 76% dice que nunca ha sufrido este tipo de violencia verbal; 13% que la ha vivido antes, pero no en el último año; y 11% sí la ha sufrido en el último año, con distinta intensidad.
Entre quienes sí han sufrido esta violencia verbal indirecta, del total de encuestados 11,6% indica que ha sido perpetrada por estudiante mujer, 9,5% por estudiante varón, 3,1% por docente varón, 1,1% por docente mujer, 0,4% por trabajador administrativo y 0,3% por trabajadora administrativa.
2.4.2. Violencia verbal directa
En cuanto a la frecuencia de insultos, palabras degradantes o humillaciones durante la interacción académica en la universidad, del 100% de los encuestados, 82% manifiesta que nunca ha sido objeto de este tipo de violencia verbal; 10% dice que antes, pero no en el último año; y 8% que sí la ha vivido en el último año, con distinta intensidad.
En cuanto a las personas que han llevado a cabo estos mensajes de violencia verbal, 82% manifiesta nunca haber sufrido insultos, palabras degradantes o humillaciones durante la
interacción académica en la universidad. Entre quienes sí los han recibido, 8% dice que han sido perpetrados por estudiante mujer, 5,8% por estudiante varón, 2% por docente varón, 1,1% por docente mujer, 0,4% por trabajadora administrativa y 0,3% por trabajador administrativo.
2.4.3. Violencia verbal por omisión
Preguntados acerca de si en la interacción académica en la universidad han sido objeto de bloqueo de diálogo, no les han cedido la palabra, los han callado o no los han escuchado, del 100% de los encuestados, 82% responde que nunca ha sufrido este tipo de violencia; 10% contesta que antes, pero no en el último año; y 8% que sí la ha vivido en el último año, con distinta intensidad.
Entre quienes sí han sufrido este tipo de violencia verbal por omisión, 9% dice que ha sido perpetrado por estudiante mujer, 4,6% por estudiante varón, 3% por docente varón, 2% por docente mujer, 0,5% por trabajadora administrativa y 0,5% por trabajador administrativo.
2.4.4. Causa por la que se cree ha sido objeto de violencia verbal
Con respecto a las causas por las que los encuestados creen que han sido objeto de algún tipo de violencia verbal, en una pregunta de selección múltiple abierta, 33,7% no cree que haya alguna causa, 18,3% lo atribuye a su aspecto físico, 16,1% desconoce la causa, 5,6% lo atribuye a su origen cultural, 5,1% a su creencia religiosa, 5% a su nivel socioeconómico, 4,2% a su orientación sexual, 4,1% a su ideología o afiliación política, 2,2% a su identificación de género y 1,7% a alguna discapacidad. Cada uno de estos porcentajes son tomados sobre el total de los encuestados.
2.5. CAPACITACIÓN O LECTURA EN TEMAS DE GÉNERO, VIOLENCIA Y AFINES
52% de los encuestados dice no haber recibido capacitación alguna o haber realizado lecturas sobre temas de género, violencia o afines, mientras que 48% manifiesta que sí las ha tenido.
III. SITUACIONES DE VIOLENCIA EN ESPACIOS DE TRABAJO
- VIOLENCIA LABORAL
69% de los encuestados manifiesta que no trabaja o que no ha trabajado recibiendo remuneración en su período como estudiante universitario (UAGRM 71%, privadas 66%), mientras que 31% sí lo ha realizado (UAGRM 30%, privadas 34%).
Del 69% que no trabaja o que no ha trabajado, 65% son varones y 71% son mujeres. Del 31% que sí trabaja, 35% son varones y 29% son mujeres.
De quienes manifiestan trabajar o haber trabajado, en general y de acuerdo a la EBAL (Escala Breve de Acoso Laboral), 49,9% declara que nunca han sufrido violencia laboral o mobbing; 49,3% que apenas (como máximo una o dos veces en los últimos tres meses) o algo (casi todas las semanas en los últimos tres meses) y 0,8% bastante (todas las semanas, más de una vez, en los últimos meses) y mucho (casi todos los días en los últimos tres meses).
A continuación se desglosan estos resultados en las seis categorías de acoso laboral:
3.1.1 Descrédito de la capacidad laboral y deterioro de las condiciones de trabajo
65% de los encuestados no considera que han sufrido este tipo de acoso laboral; 33,6% apenas y algo; y 1,4% bastante y mucho.
3.1.2 Percepción de aislamiento social laboral
78,6% dice nunca haber sufrido este tipo de violencia laboral, 20,8% apenas y algo; y 0,6% bastante y mucho.
3.1.3 Percepción de desprestigio personal
72,3% manifiesta nunca haber sufrido este tipo de violencia laboral; 26,3% apenas y algo; y 1,4% bastante y mucho.
3.1.4 Percepción sobre agresiones y humillaciones
83,6% expresa nunca haber sufrido este tipo de violencia laboral; 15,5% apenas y algo; y 0,9% bastante y mucho.
3.1.5 Robos y daños
81,9% manifiesta que nunca ha sufrido este tipo de maltrato o agresiones en el ambiente laboral; 17,3% apenas y algo; y 0,8% bastante y mucho.
3.1.6 Percepción de amenazas
87% dice nunca haber percibido amenazas directa o indirectas en el ambiente laboral; 12,2% apenas y algo; y 0,7% bastante y mucho.
IV. SÍNDROME DE BURNOUT
4.1. SÍNDROME DE BURNOUT EN RESIDENTES DE MEDICINA DE CUATRO HOSPITALES PÚBLICOS DE TERCER NIVEL EN SANTA CRUZ DE LA SIERRA.
El síndrome de Burnout (SB), de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), es un estado de agotamiento físico, emocional o motivacional caracterizado por deterioro de la productividad del trabajo, cansancio, insomnio y aumento de la susceptibilidad a las enfermedades somáticas. En la clasificación internacional de enfermedades (CIE10), está cubierto por el apartado Z73.0, problemas relacionados con el desgaste profesional (sensación de agotamiento vital).
Durante el mes de julio de 2023, se aplicaron encuestas estandarizadas y validadas para Bolivia por parte de Malash Burnout Inventory (MBI, Olivares Faúndez, n.d.) a residentes de medicina a partir del segundo año de residencia en los cuatro hospitales de tercer nivel de Santa Cruz: Hospital de la Mujer Percy Boland, Hospital San Juan de Dios, Hospital Japonés y Hospital de Niños Mario Ortiz Suárez. Las encuestas fueron auto aplicadas por cada residente a través de encuestas Google Forms en sus teléfonos móviles y enviadas luego para su registro en una base de datos en Excel. Los datos fueron analizados a través de Epi Info 7.2.; en este último estudio participaron los doctores: Freddy Tinajeros, Raul Hevia, Mario Herbas, Luis Alberto Urna, René Calvimontes, Alberto Nogales, Victor Hugo Zambrana, Jenny Aguilera y Jorge Mehdi.
En referencia a los resultados encontrados, el síndrome de Burnout identificado por la puntuación total de la encuesta fue encontrado en el 79,84% de los residentes encuestados (IC95%; 71,69%-86,51%)1. El agotamiento emocional (AE) alto se encontró en el 51,61% de los residentes (IC95%; 42,47%-60,68%), la despersonalización alta se encontró en un 37,90% de los residentes (IC95%; 29,35%-47,05%) y la realización personal baja sólo se encontró en el 6,45% (IC95%; 2,83%-12,32%).
Participaron en la encuesta 124 residentes: 16,13% del Hospital de la Mujer, 26,62% del Hospital de Niños, 23,39% del Hospital Japonés y 33,87% del Hospital San Juan de Dios.
Finalmente, se concluye que el síndrome de Burnout es elevado (79%) en los residentes del estudio, más de la mitad tiene agotamiento emocional y más de un tercio sufre despersonalización alta.